MÉXICO, D.F.(SUN)
Festejo, luto, rememoranza y regresos rodearon la 54 entrega de los premios más importantes de la música en Estados Unidos, los Grammy, realizado en Staples Center en la ciudad de Los Ángeles, California.
El rapero LL Cool J, anfitrión, pidió una oración para Whitney Houston, fallecida un día antes.
“No hay forma de evadirlo, se está viviendo una pérdida muy dolorosa en la familia del Grammy.
Whitney siempre te amaremos”, concluyó el anfitrión, seguida de una pequeña semblanza de la aparición de la cantante con el tema de “El Guardaespaldas”, misma que recibió una ovación de pie de los asistentes que en su mayoría vestían de negro.
Además de realizar un reconocimiento a aquellos que fallecieron este año y aportaron al mundo de la música, Jennifer Hudson interpretó “I will always love you”.
Quien se colocó como la gran ganadora de la noche fue Adele, quien obtuvo los seis gramófonos a los que contendía; cuando interpretó “Rolling in the deep”, del álbum 21, el cual conmocionó al público que se puso de pie con una ovación.
“No puedo creer que ya esté tan sensible”, dijo al recibir el primer premio. “Y como es a la Interpretación Vocal, necesito agradecerle a mis doctores, supongo, que me devolvieron la voz”, y también agradeció a su madre con llanto.
Bruno Mars, quien se fue con las manos vacías, fue el encargado de iniciar con las interpretaciones de la noche, con “Runaway baby”, la cual dedicó a la mulata de 48 años.
Chris Brown, ganador del R&B, ofreció un espectáculo visual y electrónico de grandes dimensiones, con “Turn off the music”; mientras su ex, Rihanna, con quien tres años atrás protagonizara una trifulca, hiciera lo propio en “We found love” y realizar una colaboración con Colplay en “Princess of China”; ellos cantaron “Paradise”, de Mylo Xyloto.
Foo Fighters se colocaron como grupo acreedor de cinco premios, dejando abajo a Kanye West con cuatro de los siete a los que contendía.
Maroon 5 y Fosther The People, fueron los encargados de realizar la antesala de la banda californiana con “Surfer girl” y “Wouldn’t it be nice”, respectivamente, para así compartir escenario con los Beach Boys en “Good vibrations” en su celebración de 50 años de carrera.
Sir Paul Mc Cartney cantó en su primera aparición “My Valentine”, además de algunos éxitos de la legendaria banda The Beatles.
En la prefiesta la difunta Amy Winehouse se llevó una estatuilla por el dueto realizado con Tony Bennett; Maná acreedor al de Álbum Rock, Latino o Urbano, Pepe Aguilar en regional mexicano y Banda o Norteño para Los Tigres del Norte, estuvieron ausentes.
Festejo, luto, rememoranza y regresos rodearon la 54 entrega de los premios más importantes de la música en Estados Unidos, los Grammy, realizado en Staples Center en la ciudad de Los Ángeles, California.
El rapero LL Cool J, anfitrión, pidió una oración para Whitney Houston, fallecida un día antes.
“No hay forma de evadirlo, se está viviendo una pérdida muy dolorosa en la familia del Grammy.
Whitney siempre te amaremos”, concluyó el anfitrión, seguida de una pequeña semblanza de la aparición de la cantante con el tema de “El Guardaespaldas”, misma que recibió una ovación de pie de los asistentes que en su mayoría vestían de negro.
Además de realizar un reconocimiento a aquellos que fallecieron este año y aportaron al mundo de la música, Jennifer Hudson interpretó “I will always love you”.
Quien se colocó como la gran ganadora de la noche fue Adele, quien obtuvo los seis gramófonos a los que contendía; cuando interpretó “Rolling in the deep”, del álbum 21, el cual conmocionó al público que se puso de pie con una ovación.
“No puedo creer que ya esté tan sensible”, dijo al recibir el primer premio. “Y como es a la Interpretación Vocal, necesito agradecerle a mis doctores, supongo, que me devolvieron la voz”, y también agradeció a su madre con llanto.
Bruno Mars, quien se fue con las manos vacías, fue el encargado de iniciar con las interpretaciones de la noche, con “Runaway baby”, la cual dedicó a la mulata de 48 años.
Chris Brown, ganador del R&B, ofreció un espectáculo visual y electrónico de grandes dimensiones, con “Turn off the music”; mientras su ex, Rihanna, con quien tres años atrás protagonizara una trifulca, hiciera lo propio en “We found love” y realizar una colaboración con Colplay en “Princess of China”; ellos cantaron “Paradise”, de Mylo Xyloto.
Foo Fighters se colocaron como grupo acreedor de cinco premios, dejando abajo a Kanye West con cuatro de los siete a los que contendía.
Maroon 5 y Fosther The People, fueron los encargados de realizar la antesala de la banda californiana con “Surfer girl” y “Wouldn’t it be nice”, respectivamente, para así compartir escenario con los Beach Boys en “Good vibrations” en su celebración de 50 años de carrera.
Sir Paul Mc Cartney cantó en su primera aparición “My Valentine”, además de algunos éxitos de la legendaria banda The Beatles.
En la prefiesta la difunta Amy Winehouse se llevó una estatuilla por el dueto realizado con Tony Bennett; Maná acreedor al de Álbum Rock, Latino o Urbano, Pepe Aguilar en regional mexicano y Banda o Norteño para Los Tigres del Norte, estuvieron ausentes.
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